Esta curiosa forma de hacerse un piercing es algo que debe doler una barbaridad. Quien realiza la perforación lleva guantes para evitar el contacto directo con quien se perfora y quiero confiar en que el objeto que utiliza está esterilizado (cosa que posiblemente no sea así). De todas formas toda precaución queda en nada si posteriormente el hombre en cuestión coge una escopeta y se la mete por el agujero que le han hecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario